Escuchar voces que no existen es una experiencia que puede parecer inquietante tanto para quienes la viven como para quienes lo observan. Esta percepción sensorial, conocida técnicamente como audiciones verbales, puede estar relacionada con una variedad de condiciones médicas y psicológicas. Aunque a menudo se asocia con trastornos mentales como la esquizofrenia, no siempre es un signo de enfermedad grave. En este artículo exploraremos a fondo qué ocurre en la mente de las personas que escuchan voces, cuáles son las causas, cómo se tratan y qué alternativas existen para entender y gestionar esta experiencia.
¿Qué ocurre en la mente de las personas que escuchan voces?
Cuando una persona escucha voces que no provienen de una fuente física real, se está experimentando un fenómeno conocido como audición psicótica o voces auditivas. Este tipo de percepción puede variar mucho en intensidad, contenido y frecuencia. Las voces pueden hablar sobre la persona, dirigirse a ella, criticarla o incluso dar órdenes. Estas experiencias son reales para quien las vive, incluso si no tienen una base en la realidad externa.
Desde un punto de vista neurológico, se cree que estas voces pueden estar relacionadas con una disfunción en ciertas áreas del cerebro, como el lóbulo temporal o la corteza auditiva. Estudios con resonancias magnéticas han mostrado diferencias en la actividad cerebral de personas que escuchan voces, especialmente en regiones asociadas con el lenguaje y la autoconciencia.
Las voces auditivas más allá de la esquizofrenia
Las voces auditivas no son exclusivas de la esquizofrenia. Muchas personas con otros trastornos mentales, como el trastorno bipolar, el trastorno de estrés postraumático (TEPT) o incluso enfermedades neurológicas como la epilepsia, pueden experimentar este fenómeno. Además, existen personas sin diagnóstico clínico que escuchan voces de forma episódica o ocasional, sin que esto se traduzca en una disfunción mental.
También te puede interesar

La resina es una sustancia natural producida por ciertas plantas, particularmente árboles, como una respuesta a lesiones o para protegerse de agentes externos. A menudo se confunde con el árbol de la resina o con productos derivados, pero su definición...

La hemoglobina baja, especialmente en pacientes con diabetes, es un tema crucial para mantener la salud general. Se refiere a un nivel insuficiente de hemoglobina en la sangre, lo cual puede indicar problemas como anemia. En personas con diabetes, este...

En la sociedad actual, el internet se ha convertido en una herramienta fundamental para millones de personas en todo el mundo. No solo facilita la comunicación, sino que también permite el acceso a información, servicios, entretenimiento y oportunidades laborales. En...

El acceso al crédito es un elemento fundamental en la vida financiera de las personas. En términos generales, cuando hablamos del crédito en personas, nos referimos al proceso mediante el cual un individuo obtiene una cantidad de dinero prestada con...

Trabajar con personas es una habilidad fundamental en cualquier entorno laboral, ya sea en empresas, instituciones educativas, servicios sociales, o incluso en proyectos colaborativos. Esta frase, aunque mal escrita como trbajar, se refiere a la interacción humana en contextos profesionales,...

El vértigo es una sensación de mareo o desequilibrio que puede afectar a muchas personas, y en los casos de pacientes con presión arterial alta, puede tener causas específicas y consecuencias preocupantes. En este artículo exploraremos qué es el vértigo...
En algunas culturas, escuchar voces puede incluso ser interpretado como una experiencia espiritual o mística. En el hinduismo, por ejemplo, se considera que escuchar voces puede ser una forma de conexión con dioses o figuras espirituales. Este enfoque cultural puede ayudar a algunas personas a normalizar sus experiencias y no verlas como síntomas de enfermedad mental.
Diferencias entre voces positivas y negativas
No todas las voces que una persona escucha son negativas o dañinas. Algunas personas reportan voces que son alentadoras, que les dan consejos o incluso las acompañan en momentos difíciles. Estas voces pueden ser percibidas como una forma de apoyo emocional, lo que ha llevado a enfoques terapéuticos que buscan integrar las voces en lugar de eliminarlas.
Por otro lado, las voces que son críticas, amenazantes o que insisten en acciones que la persona no quiere realizar pueden ser extremadamente inquietantes. En estos casos, pueden interferir con la vida cotidiana, afectando la capacidad de trabajar, estudiar o mantener relaciones sociales. La diferencia entre una experiencia positiva y una negativa depende del contenido, la frecuencia y la percepción personal de la persona.
Ejemplos reales de personas que escuchan voces
Muchos casos documentados muestran cómo las voces pueden variar ampliamente. Por ejemplo, una persona puede escuchar una voz que le dice: Eres una carga para todos, mientras que otra puede escuchar: No te rindas, puedes lograrlo. En ambos casos, las voces están impactando emocionalmente a la persona, pero de maneras muy diferentes.
En el ámbito artístico, algunos creadores han utilizado estas experiencias como fuente de inspiración. El escritor William Blake, por ejemplo, mencionó haber escuchado voces desde niño, lo cual influyó profundamente en su obra. Otros artistas, como el pintor Van Gogh, también han reportado experiencias similares. Estos casos muestran que las voces pueden tener un papel creativo, aunque no siempre sea bienvenido.
El concepto de voces como personajes internos
Una forma novedosa de entender las voces auditivas es considerarlas como personajes internos que hablan dentro de la mente de la persona. Este enfoque, utilizado en terapias como la terapia de los personajes internos (Internal Family Systems Therapy, IFS), propone que cada voz representa una parte diferente del yo, con sus propias emociones, necesidades y propósitos.
Este modelo permite a las personas explorar quiénes son estas voces, por qué están ahí y qué necesidades intentan satisfacer. En lugar de tratar de silenciarlas, el objetivo es entenderlas y negociar con ellas. Este enfoque ha ayudado a muchas personas a recuperar el control sobre sus experiencias y a reducir el malestar asociado a escuchar voces.
5 trastornos asociados a escuchar voces
- Esquizofrenia: Es el trastorno más conocido con el que se asocia escuchar voces. Afecta a aproximadamente 1% de la población mundial.
- Trastorno bipolar: Algunas personas con trastorno bipolar pueden experimentar episodios con síntomas psicóticos, incluyendo audiciones.
- Trastorno de estrés postraumático (TEPT): Las voces pueden surgir como una forma de revivir traumas o como representaciones de figuras que estaban presentes durante el evento traumático.
- Trastorno de personalidad esquizotípica: Se caracteriza por pensamientos extraños y comportamientos inusuales, incluyendo la percepción de voces.
- Trastorno de la identidad disociativa: En algunos casos, las voces pueden ser interpretadas como voces de diferentes identidades o estados de la persona.
Escuchar voces y la salud mental
Escuchar voces no siempre implica un trastorno mental. Muchas personas que viven con estas experiencias no presentan otros síntomas de enfermedad psiquiátrica. Sin embargo, cuando las voces son inquietantes, frecuentes o interfieren con la vida cotidiana, pueden ser un signo de necesidad de apoyo profesional.
Es importante destacar que no todas las personas que escuchan voces quieren o necesitan medicación. Algunas encuentran que terapias psicológicas, apoyo social y técnicas de autorregulación les ayudan a manejar sus voces de una manera más armónica. En muchos casos, la relación con las voces puede evolucionar con el tiempo, desde experiencias perturbadoras hasta algo más comprensible o incluso útil.
¿Para qué sirve escuchar voces?
Aunque escuchar voces puede parecer una experiencia negativa, en ciertos contextos puede tener una función adaptativa. Por ejemplo, algunas personas mencionan que sus voces les ayudan a recordar tareas, les ofrecen apoyo emocional o les dan una sensación de compañía. En otros casos, las voces pueden reflejar conflictos internos o emociones no expresadas.
Desde una perspectiva evolutiva, algunos teóricos sugieren que escuchar voces puede haber sido una forma de adaptación en el pasado, permitiendo a las personas anticipar amenazas o resolver problemas sociales. Aunque esto no justifica el malestar que pueden causar, sí ayuda a entender que no siempre son síntomas negativos.
Escuchar voces como experiencia no patológica
En los últimos años, se ha promovido una visión más comprensiva de las voces auditivas, que no las ve únicamente como síntomas de enfermedad. La Red de Personas que Escuchan Voces (Hearing Voices Network), fundada en los Países Bajos, es un ejemplo de este enfoque. Esta organización apoya a las personas que escuchan voces sin necesariamente etiquetarlas como enfermas.
Este movimiento se basa en la idea de que las voces pueden tener sentido, incluso si no son reales. En lugar de tratar de eliminarlas, se busca comprenderlas y encontrar formas de convivir con ellas. Este enfoque ha ayudado a muchas personas a recuperar su autoestima y mejorar su calidad de vida.
Las voces auditivas en la cultura popular
Las voces auditivas han sido representadas en la cultura popular de muchas formas. En la literatura, el protagonista de El paciente inglés de John Le Carré escucha voces que le indican lo que debe hacer. En el cine, películas como A Beautiful Mind o Split exploran el impacto de escuchar voces en la vida de los personajes. Estas representaciones, aunque a veces exageradas, ayudan a sensibilizar al público sobre la realidad de quienes viven con esta experiencia.
En la música también se han referido a las voces auditivas. Artistas como Pink Floyd, en su canción The Fletcher Memorial Home, o David Bowie, en The Man Who Sold the World, han tocado temas similares. Estas expresiones artísticas permiten a algunas personas sentirse comprendidas y no tan solas.
El significado de escuchar voces
Escuchar voces puede tener múltiples significados según la persona que lo experimente. Para algunos, es una señal de desequilibrio psicológico que requiere intervención. Para otros, puede representar un mensaje personal, una conexión con un ser querido fallecido o incluso una manifestación espiritual. No existe un significado único, ya que cada experiencia es única.
Desde un punto de vista psicológico, escuchar voces puede ser una forma de expresar emociones no resueltas, como tristeza, miedo o ira. En algunos casos, las voces pueden surgir como una forma de lidiar con traumas o situaciones de estrés. Comprender el significado de las voces puede ser un paso importante para gestionarlas de manera efectiva.
¿De dónde vienen las voces auditivas?
El origen de las voces auditivas es complejo y puede estar relacionado con múltiples factores. Desde un punto de vista biológico, se cree que pueden estar vinculadas con alteraciones en la química del cerebro, especialmente en la producción de neurotransmisores como la dopamina. Estudios han mostrado que niveles altos de dopamina pueden estar asociados con la aparición de voces.
También existen factores psicológicos que pueden desencadenar estas experiencias. El estrés, la depresión, la ansiedad y los traumas pueden contribuir a que alguien empiece a escuchar voces. En algunos casos, el uso de drogas psicoactivas o la privación de sueño también pueden provocar audiciones temporales.
Escuchar voces como una experiencia común
Aunque puede parecer raro, escuchar voces es más común de lo que mucha gente piensa. Estudios recientes sugieren que alrededor del 5% de la población general ha experimentado al menos una vez en la vida la experiencia de escuchar voces que no provienen de una fuente real. Esta cifra sube en ciertos grupos, como estudiantes universitarios o personas con alta creatividad.
Esta experiencia no es exclusiva de ninguna cultura o edad. Aunque es más frecuente en personas jóvenes, también se ha observado en adultos mayores. Lo que varía es cómo se interpreta: en algunos contextos se ve como un problema, en otros como una experiencia normal o incluso positiva.
¿Cuándo es peligroso escuchar voces?
No todas las voces son peligrosas, pero sí lo pueden ser cuando se acompañan de otros síntomas como delirios, desorganización del pensamiento o cuando las voces insisten en comportamientos riesgosos. Si las voces son amenazantes, críticas constantes o si la persona comienza a perder el contacto con la realidad, puede ser un signo de que necesita apoyo profesional.
Es importante que cualquier persona que experimente estas voces busque ayuda si siente que están interfiriendo con su vida diaria o si están causando malestar emocional. La temprana intervención puede marcar la diferencia entre una experiencia manejable y una que se convierta en un trastorno crónico.
Cómo usar la experiencia de escuchar voces
Muchas personas que escuchan voces han desarrollado estrategias para convivir con ellas. Por ejemplo, algunas aprenden a negociar con las voces, estableciendo límites claros sobre qué pueden o no hacer. Otras utilizan técnicas de mindfulness para mantener la calma cuando las voces se vuelven inquietantes.
También es útil llevar un diario de las voces, registrando quién habla, qué dice, cuándo lo hace y cómo se siente la persona en ese momento. Esta práctica ayuda a identificar patrones y a desarrollar una comprensión más profunda de la experiencia. En muchos casos, esta comprensión es el primer paso hacia una mejor gestión.
El impacto social de escuchar voces
Escuchar voces puede tener un impacto significativo en la vida social de una persona. Muchas reportan sentirse estigmatizadas, especialmente en entornos donde se asocia esta experiencia con locura o peligro. Esta estigmatización puede llevar a la aislación, a la dificultad para buscar ayuda y a un deterioro en la autoestima.
Sin embargo, también existen comunidades y grupos de apoyo donde las personas pueden compartir sus experiencias sin juicios. Estos espacios son vitales para romper el aislamiento y para encontrar respuestas que no se encuentran en el sistema tradicional de salud mental. La conexión con otras personas que viven situaciones similares puede ser una fuente poderosa de apoyo y comprensión.
El futuro del tratamiento de las voces auditivas
El campo de la salud mental está evolucionando y se están explorando nuevas formas de abordar el fenómeno de escuchar voces. La terapia cognitivo-conductual para trastornos psicóticos (CBTp) es una de las más efectivas en la actualidad. Esta terapia ayuda a las personas a entender las voces desde otra perspectiva y a desarrollar estrategias para reducir su impacto emocional.
Además, se están investigando tratamientos basados en la neurociencia, como la estimulación transcraneal con corriente (tACS) o la estimulación magnética transcraneal (rTMS), que podrían ayudar a modificar la actividad cerebral asociada a las voces. Estos enfoques son prometedores, aunque aún están en fase de investigación.
INDICE